Me viene al recuerdo, por un suceso reciente, una vieja
historia entre trágica y divertida.
En cierta ocasión, el
marido de una amiga mía marroquí me dijo “Inma, búscale a mi hijo una novia en España
para que se vaya allí. He contratado internet en casa para que se conecte y
conozca chicas españolas y francesas, a ver si conquista a alguna y puede salir
de Marruecos”
A mí la sola intención de este tipo me pareció tan asquerosa
e insultante que rápidamente se me ocurrió
una respuesta, de una clase que para este
individuo impresentable y retrogrado sería tan asquerosa e insultante como lo
que el proponía o incluso más aún.
Le dije “Si lo que
quieres es sacar a tu hijo del país a través de un matrimonio, hay una solución
rápida. Como tu hijo es muy guapo y tiene muy buen cuerpo, yo tengo varios
amigos gays que le puedo presentar, como sabes en España está legalizado el
matrimonio entre hombres y estoy completamente segura que un chico tan guapo no
va a tener ningún tipo de problema en conquistar a cualquiera de los amigos
gays que le presente.
La reacción de este hombre fue tremenda, muy airado me dijo
que su hijo no era maricón, a lo que yo le conteste que las mujeres no eran un
visado para ser usado en beneficio propio, que eran seres humanos con
sentimientos y que la sola idea de usarlas con este fin me parecía repugnante.
Bueno, pues estos días le ha pasado algo parecido a una muy
querida amiga llamemosla Fatima (me ha pedido que no ponga su nombre) , musulmana conversa hace ya 12 años y buena persona
donde las haya. Conoció en su pueblo a un chico subsahariano, Mohamed (tambien me ha pedido que no ponga su nombre), musulmán,
joven y aparentemente buena persona también. Este hombre, “ilegal”, se dedicó
con todas sus fuerzas a conquistar a mi amiga, hasta que consiguió enamorarla y
casarse con ella.
Con este matrimonio consiguió legalizar su precaria situación
de “sin papeles” , una casa con comodidades, una familia que lo apreciaba, y en
fin, dejar de pasar calamidades y pasar a ser un ciudadano con derechos.
Mi amiga Fatima realmente estaba enamorada de Mohamed, me
decía que era un ángel, amable, cariñoso, respetuoso, un hombre ideal, que se
buscaba la vida en cualquier trabajo que le saliese.
Colaboraba en los gastos de casa en una medida bastante
humilde ya que tenía que mandar dinero a su familia en su país de origen y Fatima quería que la familia de su marido la conociese, estaba ilusionada con
pertenecer a esa familia africana. Un dia Mohamed fue a visitar a sus padres, había
mandado hasta su último euro a su país, y no era poco, tan es así que mi amiga
hubo de prestarle el dinero del billete, y le había encargado muy
encarecidamente que le trajese telas típicas de allí, quería hacerse algún vestido
con ellas.
Pues bien, el día que llegó Mohamed, vino sin telas ¡ni un
metro! porque se había gastado todo el dinero en su boda, y así se lo hizo
saber a mi amiga, además no solo se había casado, un hijo venia de camino. Ante
el horror de mi amiga, este individuo le contó que lo habían obligado a
casarse, pobrecito él. Mi amiga como es natural, quedó destrozada y mandó al
impresentable a Parla, por lo menos.
Tremendamente impactada por esta traición y esta forma tan
terrible de usarla para sus fines, Fatima consultó con un imam de la misma
nacionalidad que este desaprensivo (el imam viene a ser lo más parecido a un
sacerdote católico) que le dijo que el 90% de los hombres de su país que vivían
en España tenían esa forma de proceder. Eran, para su vergüenza, traidores y
aprovechados que usaban a las mujeres para su propio beneficio.
Las dos historias son muy parecidas, lamentable una y
lamentable la otra.
Querida Fatima, ánimo y fuerza para superar esta sórdida experiencia
que tú no te merecías de ninguna de las maneras como ninguna mujer se merece,
porque ser tratada como ganado para mayor beneficio de estos individuos es algo feo y
repugnante.Estoy segura que superaras este bache con la fuerza que
siempre has demostrado, y dentro de poco pensaras que todo ha sido una
pesadilla, de la que con seguridad habrás sacado una buena enseñanza.
Y otra cosa te digo, como buena creyente que eres y me
consta, sabes que nada sucede sin el expreso deseo de Dios, que esta prueba sería
lo mejor que te podía pasar en este tiempo.
Como decía mi madre “Dios escribe derecho con renglones
torcidos”
Mil besos queridísima amiga.
por favor que alguien se atreva a crear un sitio para mujeres afectadas por subsaharianos
ResponderEliminarTeresa Montasell, he escrito este articulo a petición de una amiga afectada por este triste asunto, pero creo que sois vosotras, las afectadas, las que deberíais de crear una asociación para defender vuestros derechos y dar difusión al problema, con ello ayudareis, posiblemente, a muchas mujeres a que no sufran este triste destino.
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