Era necesario dejar pasar unos días, reposar el resultado y
escuchar los improperios de izquierda y derecha para poder opinar globalmente. Digo
opinar globalmente, porque yo ya tenía mi opinión sobre Podemos, una muy buena opinión,
y tanto es así que les di mi voto.
Soy socialista militante- militante y discrepante, dicho sea
de paso-muy descontenta con las políticas y posturas del aparato del partido, y
del gobierno cuando han gobernado.
No comparto la mayoría de las decisiones que toman los
mandamases de las ejecutivas, que mandan sus consignas y caen en cascada desde
arriba para abajo, y que son palabra de rey. El lema es, “han ganado el
congreso y la ejecutiva que ha salido es
nuestra ejecutiva, nos guste o no” y sí, esa sería la postura, siempre y cuando
los militantes pudiéramos decir algo, pero no es el caso. Los que conocemos
estos aparatos por dentro, sabemos de las presiones, negociaciones, las
alianzas, los enjuagues, la lucha a cara de perro por un trozo de poder.
Se agarran a los estatutos para hacer y deshacer, y se hacen
las cosas según los estatutos si se quiere, y como quien hizo la ley, hizo la
trampa, se sacan una posibilidad de hacer las cosas menos ortodoxamente si es
necesario, y a los últimos hechos me remito. Ahora si se pueden hacer
elecciones y votaciones del tipo, un militante, un voto, cuando eso hace unos
meses fue imposible.
Soy socialista convencida, pero socialista de las de Pablo
Iglesias-Pablo Iglesias el fundador del Partido Socialista y UGT, no del líder de
Podemos-y me da repelús ver en que se ha ido convirtiendo el partido, eso no
significa dejar de militar, significa que hay que luchar por volver sobre
nuestros fueros ideológicos y demostrar sobre el terreno lo que es ser
socialista, con el ejemplo personal.
Entonces, aunque suene aberrante, he votado y me he
alegrado, y mucho, del triunfo de Podemos, me he relamido de placer al ver a la
derechona insultar y descalificar al líder y a la recién nacida y triunfante formación
¡eso es miedo del bueno! Con cada
insulto y cada descalificación, hacen más fuerte al neófito partido, del cual
comparto casi todo su programa, como debería hacer el Partido Socialista,
porque el programa no es otro que defender al que menos tiene, redistribuir la
riqueza, potenciar el estado de bienestar, ejercer la justicia social, hace que
pague más quien más tiene, socializar el conocimiento, la educación y la salud,
no nacionalizar las perdidas y privatizar las ganancias, clarificar la vida pública,
evitar los escandalosos latrocinios de políticos, ricos y banqueros, poner coto
a la vidorra que supone dedicarse a la política, derrumbar chiringuitos de
poder y servidumbres políticas al sector económico, dar voz y voto a la gente,
practicar la democracia en suma.
Este proyecto me ha devuelto la ilusión y la esperanza, al
fin veo que no está todo podrido y perdido, al fin veo una luz dentro de tanta
oscuridad.
Al fin ellos, los gerifaltes del Partido Socialista, han
visto los cuernos de la derrota cerquita, tan cerquita que del arañazo de las últimas
elecciones, ahora han recibido una cornada en la femoral, casi mortal si no se
ponen los medios para evitar la hemorragia fatal, y ahí están ellos, intentando
mantenerse en sus sillones, luchando por su cachito de poder, los unos a la
antigua usanza, los otros queriendo democracia interna y los de la moto entre Pinto
y Valdemoro, sin acabar de mojarse, poniendo una vela a dios y otra al diablo.
Espero con ilusión que de esta catástrofe salga algo bueno,
democracia y socialismo, y que de una buena vez se larguen los arribistas,
vividores y paniaguados, se retiren los dinosaurios y comience una época fresca
y nueva.
Del PP no digo nada ¿para qué?, ya ellos lo dicen todo.
Bueno, y una vez despierta y acabado mi sueño, me digo con
tristeza ¡qué bonito es soñar!, porque dudo mucho que de esta hayan aprendido
que el pueblo no perdona.
Señoras y señores, aquí en mi blog lo vengo diciendo hace
tiempo, el pueblo no perdona, no perdona el hambre, la miseria, los robos, la corrupción,
los recates a bancos, las casas vacías, los negociazos, la vidorra del político,
mientras la gente las pasa putas.
Lo dicho, se ha demostrado ¡PODEMOS ¡
Querida Inma.. al margen del contenido del artículo, tengo que volver a destacar algo que, desde la primera vez que te leí en un foro hace muchos años llamó mi atención y no es otra cosa que tu capacidad para ver la paja en el ojo ajeno y la viga en el tuyo si es menester, y viceversa. Eso te hace creíble.. Lo de "Al pan, pan y al vino, vino" y "No casarse con nadie" se inventó para casos como el tuyo.. felicidades, de las de verdad. Besos.
ResponderEliminarCarmen, gracias por tu opinión, me conoces y sabes que nada mas lejos de mi intención que trepar y "buscarme la vida". Sera que ya la tengo bien buscada y por eso, no hay forma de doblegarme. Oye, y si no les gustan mis opiniones, que me echen, aunque quizás, según hagan ahora, antes me vaya yo. Un beso
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