Es inevitable publicar hoy un FIN DE LA CITA

La verdad es que normalmente mueve a la hilaridad oír  hablar a ese hombre que sufrimos como presidente del gobierno.

Sí, normalmente es cómico escuchar esas eses tan peculiares y babosas, ver esos tics tan ridículos, ese guiño del ojo izquierdo, ese levantamiento de hombros, esos fruncimiento de entrecejo, parece que este hombre tenga un TOC, trastorno obsesivo compulsivo, por el que no puede evitar hacer todas esas morisquetas que tan ridículas resultan.

Pero lo de la comparecencia de hoy, vamos, se lleva la palma, y es que ha resultado patético y para mondarse de risa escuchar a este soso, mentiroso, torpe, gesticulante presidente de todos los españoles, leer el discurso, que es obvio alguien le ha escrito, literalmente hasta con los paréntesis que le indicaban que estaba citando textualmente las palabras de otra persona (FIN DE LA CITA), y el zopenco lo ha leído hasta en nueve ocasiones, dando en cada caso un énfasis distinto, los asistentes a la comparecencia no daban crédito, y claro, como era de esperar allí mismo ya le han soltado los primeros chistes, que para eso los españoles nos las pintamos como nadie.

Ha sido trending topic mundial, el hazmerreír de todas les televisiones, periódicos y medios de comunicación del mundo entero.

De risa va a ser cuando, y esperemos que así sea, lo llamen a declarar como imputado y tenga que dar explicaciones de la corrupción sistemática en la que se ha movido su partido y los gerifaltes pasados y presentes  que en el PP han sido, porque el hasta hoy innombrable Bárcenas está utilizando la técnica del escorpión, morir matando, al más puro estilo mafioso.

Pero que la ridiculez del tipo este no nos distraiga del fondo de la cuestión, ha aparecido y ha dicho literalmente “en dos palabras: me equivoque”, y listo, cubierto el trámite se ha dedicado a poner el ventilador y repartir mierda del tipo “y tú más” tratando de despistarnos del leit motiv de su comparecencia, explicar la corrupción de su partido, la financiación ilegal, la contabilidad B, los sobres, las contrataciones a dedo, el aumento escandaloso del patrimonio personal de más de uno y más de dos.

Que no nos distraiga el petimetre del trastorno gesticulante, que explique las chorizadas y luego pian pianito que se largue con los gestos a otra parte.

La verdad es que en estos momentos siento una profunda vergüenza de pertenecer a un país donde la mayoría ha votado a semejantes personajes, corruptos, chorizos, mentirosos, y encima zoquetes que nos hacen hacer el ridículo, entre la intervención de Rajoy de hoy y las explicaciones de Cospedal de la indemnización diferida, hoy por hoy ser de este país es para esconder la cara detrás de las manos.

Y ahora no lo puedo evitar, voy a caer en lo mismo que todo el mundo, váyase señor Rajoy, VAYASE (fin de la cita).