Es menester ver la incultura democrática y política que inunda a este país,
eso sí, independientemente del absoluto
desconocimiento de las normas que rigen
a las instituciones que representan al poder según la Constitución-la Ley de Leyes-
aquí todo quisque opina ¡Y vaya tela las barbaridades que hay que escuchar!
A ver queridos opinadores, en
este país hay tres ramas, facultades o funciones primordiales del Estado, que hipotéticamente
son independientes entre sí, y que son a saber: El poder legislativo, el poder ejecutivo
y el poder judicial.
El poder legislativo es el que aprueba y deroga leyes, el poder judicial
es el que interpreta y hace respetar, o invalidar en su caso, dichas leyes, y
el poder ejecutivo que es el responsable de ejecutar políticas generales con arreglo
a las leyes que han sido aprobadas ¿De acuerdo?
En cualquier estado democrático el poder
ejecutivo no es ni más ni menos que el administrador y ejecutor de la voluntad
popular, esta voluntad es la que nosotros le damos a través de las urnas, con
nuestro voto.
Pues bien, queridos opinadores
y compartidores de barbaridades varias en las redes sociales, cuando votamos,
cuando depositamos la papeleta de nuestra preferencia en las urnas, votamos a
una lista que lleva los nombres de aquellas y aquellos que en el partido al que hemos decidido dar
nuestra confianza han considerado los
mejores representantes, aquellos en los que depositamos el poder de representar
nuestra voluntad.
Queridas y queridos opinadores,
en España no se elige presidente ¡Que no, que no! Que al presidente lo eligen los
diputados electos.
Si hay mayoría absoluta de un partido el presidente
será la persona que decida esa mayoría y la legislatura durará cuatro años, ya
que tienen las riendas para ellos solos y les va a importar muy poco lo que diga la oposición,
que son los que no han conseguido la mayoría.
En caso de que no se dé la
circunstancia de una mayoría abrumadora, el presidente se elegirá entre alguna
persona del partido más votado, siempre y cuando este partido encuentre apoyos
entre los representantes de otros partidos que les den sus votos para conseguir
la mayoría de la cámara baja -o sea el congreso de los diputados- en caso contrario se puede dar la
circunstancia de que el presidente sea una persona de un partido menos votado
pero que sin embargo cuente con el apoyo mayoritario de otros partidos y con
estos apoyos sean ellos, los menos votados, quienes consigan esa mayoría ¿Lo
vamos pillando?
También puede pasar que el
partido más votado y que ha puesto su presidente gracias a alguna alianza con algún
partido que le dé su apoyo, por motivos varios pierda esa confianza y con ella
los apoyos que lo sostienen, en este caso hay varias opciones que van desde una dimisión
del presidente y posterior nombramiento de otro del mismo partido y del gusto
del grupo que lo apoya, otra opción es
una dimisión del gobierno en pleno y convocatoria de elecciones y otra opción también
es una moción de censura donde la oposición busca apoyos y cuando los consigue le
pide al presidente que se vaya y presenta a otro candidato, la cámara vota y si gana el sí el que pierde
fuera y el que gana dentro ¡Fácil! ¿No?
Una vez que el congreso de los
diputados elige presidente, ese es el presidente del país, nos guste más, nos
guste menos, lo hayamos votado o no, ese y no otro es el presidente, y no hay
más ¿Lo vais entendiendo?
Bueno ahora os voy a contar un
secretillo queridas y queridos opinadores- aunque sea un secreto a voces porque
así está legislado y por lo que se ve no lo sabéis- para ser presidente del
gobierno no hay que ser diputado, senador ni haber ido en ninguna lista
electoral ¡Fíjate tú! ¿Qué sorpresa eh? ¡Ahora sí que lo vais aprendiendo! ¿No?
Total, que estoy ya un poco
harta de leer que Pedro Sánchez no es el presidente que ha elegido esa basca incontinente verbal y altamente
inconsecuente e inculta política y democráticamente hablando, que no saben aún que en nuestro sistema no se elige
presidente sino representantes y que estos son los que eligen al presidente,
que para ser presidente no hay que ser diputado, aunque así haya sido casualmente
en España con los seis presidentes, y que Pedro Sánchez fue elegido
diputado en las últimas elecciones de 2016, otra cosa es que decidió dimitir
por problemas con su partido, pero esa es otra historia.
Así que queridas y queridos
opinadores y compartidores de cualquier cosa que os llegue por internet, igual
que yo no voté jamás a M.Rajoy y sin embargo lo he sufrido de presidente durante casi siete años porque así lo
eligieron la mayoría de los diputados, ahora el presidente es Pedro Sánchez por
el mismo motivo, y a quien le toque sufrirlo que lo sufra, que yo estoy muy contenta.
¡Ea! con esto quiero decir que
cuando hay mayoría en el congreso de los diputados pasan estas cosas, y que los
presidentes son como con los botones, uno se quita y otro se pone.
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